En las etapas intermedias y finales de la producción de petróleo, una gran cantidad de agua producida ingresa al sistema junto con el crudo. Esto afecta la producción de crudo debido al excesivo volumen de agua. Nuestra tecnología de deshidratación para optimizar la producción de crudo consiste en separar el agua presente en el fluido de producción o de entrada mediante un ciclón de deshidratación de alta eficiencia. Este proceso elimina la mayor parte del agua y la hace apta para su transporte o posterior procesamiento, especialmente cuando se instala en la plataforma de cabeza de pozo. Esta tecnología mejora significativamente la eficiencia de producción en los campos petroleros, como la eficiencia del transporte por oleoducto submarino y del separador de producción, además de aumentar la capacidad de producción de crudo, reducir el consumo de equipos y los costos de producción. Asimismo, contribuye de manera fundamental a garantizar la seguridad de los trabajadores y la calidad del producto final.

Junto con las instalaciones de tratamiento de aguas producidas, el hidrociclón desaceitador y la unidad de flotación compacta (UFC), en este caso, toda el agua producida se desecha por la borda.